viernes, diciembre 12, 2003

Internet no funciona...

La verdad es que cada vez son más las veces que oímos esta frase, todos aquellos que nos sentimos involucrados en nuestro día a día con el correo electrónico, que poco a poco se va extendiendo al resto de la sociedad.

¿Realmente funciona mal Internet? Bueno, pues podríamos decir que el caos que se preveía empieza a hacerse notar.

Todos apostamos por las Nuevas Tecnologías, la introducción en la era tecnológica… y presumimos que ya sabemos enviar un email.

Bien, lejos de esta realidad, y tocando a pie de calle el día a día de las personas con la informática…, puedo asegurar que la afirmación es falsa. Sí se está actualizando al gran público en las Nuevas Tecnologías, y los gobiernos demuestran su preocupación haciendo grandes inversiones en formación, pero ¿quién controla esta formación?

Desgraciadamente nadie…, o nadie con un poco de visión estratégica sobre las repercusiones reales que implica el dar acceso a todo el mundo a Internet. El problema, como la mayoría de las veces, se reduce a que no hay infraestructuras suficientes que soporten todo el tráfico que circula, a no ser que se controlen o se limiten los accesos.

Voy a sintetizarlo mucho: todo el mundo a enviar a emails, pero a nadie se le ocurre comprimir los ficheros. Lo primero que se aprende a hacer con las Nuevas Tecnologías, es un PowerPoint lleno de fotos, que ocupa aproximadamente 3 Mb y a enviarlo por email. De esta forma, cuando leemos estadísticas sobre el crecimiento de introducción a las TIC en España, y lo satisfechas que están las compañías de comunicaciones que venden accesos de banda ancha…, realmente nos tendríamos que echar a temblar.

Espero que no me malinterpretéis, porque no se trata de cortar los accesos a la sociedad de la información, lo que pretendo es primero una concienciación global, porque cuanto mejor enviemos nuestros archivos (controlando su tamaño, y estudiando o preguntando cómo podemos hacerlos más pequeños), mejor navegaremos todos.

Lo segundo que pretendo, es un poco más utópico, y os invito a que tengáis en cuenta una reflexión importante: no os dejéis engañar por esta incorporación masiva a las Nuevas Tecnologías, puesto que “los que mandan” manipulan la información como mejor se les antoja. El símil del tráfico es el más adecuado. Venid todos a Barcelona, todas las empresas en Barcelona, todos los trabajadores a Barcelona… pero ¿os habéis enfrentado un lunes por la mañana a entrar a Barcelona? Y no es que Barcelona no valga la pena, pero hay demasiado tráfico para las vías de entrada…, y la culpa ¿es de los usuarios que no tienen derecho a tener coche? ¿o quizás algún ser todopoderoso nos tendría que proporcionar más vías de acceso? Tal y como os comentaba al iniciar el párrafo, os invito a la reflexión.